Marcelo Barovero rechazó quedarse en River Plate y ahora su carrera se fue al caño

Marcelo Barovero es de los mejores y más queridos arqueros en la historia de River Plate. Con sus atajadas hizo feliz a toda la hinchada del Millonario. La más recordada es cuando le tapó el penal a Emmanuel Gigliotti, en ese entonces jugador de Boca Juniors, en las semifinales de la Copa Sudamericana 2014. Después de eso, le ganaron la final a Atlético Nacional de Colombia y Marcelo Gallardo obtuvo su primer título como entrenador del club de sus amores.

Un año más tarde, con Barovero como figura, River levantó su tercera Copa Libertadores y cortó una sequía de 19 años en esa competición. En 2016, el arquero decidió irse del Millonario cuando se le venció el contrato, aunque Rodolfo D´Onofrio pretendía renovarle, y a partir de ese momento su carrera cayó en picada.

Se fue a jugar al Necaxa de México donde obtuvo la Copa MX y luego al Monterrey del mismo país, donde ganó la Liga de Campeones de la Concacaf y la Liga MX. Si bien pudo ganar títulos nuevamente nunca volvió a jugar en un equipo tan grande como River. En la actualidad decayó aún más: firmó con el Burgos CF de la Tercera División de España, donde permanece hasta la fecha.