(VIDEO) Esta dirigencia de Boca hace todo mal, por eso se le fue Barco y por eso se irá Equi Fernández

Todo parece indicar que Ezequiel Fernández, después de jugar en Argentina en la cita olímpica francesa, no volverá a Boca Juniors, no regresará a Argentina y se irá a jugar al fútbol de Arabia. Poco le importa a Fernández y a su representante si Boca está de acuerdo o no, porque para eso existe la cláusula de rescisión. Hay una cláusula estipulada que marca un determinado monto por el cual el club ya no puede opinar más. Más allá del deseo de que todo sea en armonía y de común acuerdo, si Boca sigue dilatando la situación, es probable que la historia termine con el depósito de la cláusula de rescisión y Boca no tenga ningún tipo de injerencia, decisión u opinión al respecto.

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El mecanismo de la cláusula de rescisión es un salvoconducto para el deportista que no quiere esperar el aval de la dirigencia si desea irse. Además, es un monto que ambas partes acordaron al firmar el contrato, aunque con el tiempo esa cifra pueda parecer insuficiente. Evidentemente, Boca valora a Fernández de manera distinta ahora. Boca debería respetar lo firmado, ya que si el representante y el futbolista no quieren discutir más, pueden depositar lo que dice la cláusula y Boca tendrá que aceptar esos 15 millones. De esos 15, Boca recibe solo el 70%, ya que un 20% pertenece al ex club de Fernández y un 10% al propio jugador. Así, a Boca le quedarían alrededor de 8.5 millones, lo cual sigue siendo una buena suma para un futbolista del que es dueño solo del 70%.

Aquí también hay que entender que Fernández quiere forzar su salida para volverse millonario y asegurar su futuro y el de su familia. A pesar de ser un muy buen jugador con posibilidades en otros mercados, elige asegurarse ahora. Fernández ya se vuelve millonario con el 10% que le corresponde más el contrato que firmará, independientemente del buen salario que tiene en Boca.

Las cláusulas de rescisión deben respetarse, para eso están. Si un equipo quiere incrementar el monto de la cláusula, debe renegociar con el futbolista y su representante. Pero si Boca considera que Fernández ahora vale más, debe pagarle como tal. La dirigencia de Boca ha priorizado a jugadores veteranos como Rojo en lugar de a jóvenes talentos, y esto ha llevado a la pérdida de jugadores jóvenes por poca plata.

En resumen, si Boca no quiere perder a jugadores jóvenes, debe valorar mejor sus aportes y pagarles adecuadamente. Fernández y su representante ya han acercado varias ofertas a Boca, pero siempre encuentran una dificultad. Por eso, la decisión del futbolista es irse, por las buenas o no, usando la cláusula de rescisión que fue pactada y firmada por ambas partes.

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Me sorprende, eso sí, que Fernández quiera jugar en Arabia a su corta edad, con el presente y futuro que tiene. No sé quién lo aconseja, pero no me meteré en su decisión. Si él quiere privilegiar lo económico, ¿quién puede señalarlo?