Por Ramiro Diaz
La gestión de Juan Román Riquelme como presidente del Club Atlético Boca Juniors está dejando mucho que desear en todos los aspectos. Tanto él como los demás dirigentes, especialmente el consejo de fútbol que se armó hace unos años, no están tomando las mejores decisiones, y el club se está viendo perjudicado, ya que los resultados deportivos no acompañan. Esto se debe a los malos manejos que hay puertas adentro.
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Hace no tanto, un gran porcentaje de hinchas volvió a confiar en el máximo ídolo de la institución, pero ahora muchos se están dando cuenta de que no es lo mismo ser futbolista que dirigente. Román no parece ser el indicado para formar parte de la política del club. Aunque queda mucho tiempo y tendrá que trabajar para revertir la situación, si todo sigue igual, difícilmente sea reelegido en las próximas elecciones presidenciales.
A pesar de que tanto el cuerpo técnico como los futbolistas también son responsables del pésimo presente de Boca, que en este 2024 parecía que iba a competir al máximo, pero que se quedó eliminado de todo, ahora solo le quedan dos objetivos por cumplir: la Copa Argentina y la Liga Profesional. Los principales señalados son Riquelme y su equipo, que no eligen bien los refuerzos, gastan el dinero de manera ineficiente, permiten que se vayan futbolistas libres, y sufren filtraciones de problemas internos, entre otras cosas que están agotando la paciencia de la gente.
A pesar de que tanto el cuerpo técnico como los futbolistas también son responsables del pésimo presente de Boca, que en este 2024 parecía que iba a competir al máximo, pero que se quedó eliminado de todo, ahora solo le quedan dos objetivos por cumplir: la Copa Argentina y la Liga Profesional. Los principales señalados son Riquelme y su equipo, que no eligen bien los refuerzos, gastan el dinero de manera ineficiente, permiten que se vayan futbolistas libres, y sufren filtraciones de problemas internos, entre otras cosas que están agotando la paciencia de la gente.
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Hugo Gatti apoyó a Román con estas palabras: "Me encanta Riquelme. Mirá que yo lo he criticado mucho, eh. Me encanta Riquelme, una personalidad... ¿Sabés cuántos jugadores quisieran decirles a los periodistas 'cállense y no hablen más'? Y Riquelme tuvo las pelotas de decirlo". Y agregó: "Primero, está mal que la gente grite 'amargo, amargo'".Para justificar sus declaraciones, trajo como ejemplo a Messi: "Lo que yo digo: si Argentina no hubiera salido campeón del mundo, Messi hubiese sido un amargo. Y ahora esto es lo mismo. Es el público argentino que no tiene educación y cada vez estamos más atrasados; no lo reconocemos y no lo decimos". Por último, cerró con una crítica hacia los argentinos: "Estamos cada vez peor. Llorones, mentirosos, charlatanes, porque yo también soy argentino y charlatán. Somos mentirosos y hemos retrocedido los argentinos de una forma que asusta. Y hoy en Argentina hay cada vez más extranjeros que ciudadanos. Yo veo cada vez más extranjeros, no hay más argentinos".
22/11/2024
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