Era mejor que Nahuel Molina, se fue mal de Boca y juega en una liga menor

En el último lustro, Boca Juniors cambió el enfoque y comenzó a ‘fabricar’ jugadores en la propia cantera. Históricamente, el Xeneize era un club que se caracterizaba por comprar a la figurita del momento o bien, jerarquía dentro del mercado nacional e incluso internacional. Sin embargo, gracias a un trabajo formidable desde las infantiles hasta las divisiones inferiores, comenzaron a surgir futbolistas que se ganaban un lugar en el primer equipo, o al menos eran considerados. 

Un caso aparte es el de Nahuel Molina. El actual lateral derecho del Atlético Madrid y de la Selección Argentina logró debutar de la mano de Guillermo Barros Schelotto, pero en ese entonces estaba muy tapado por jugadores de más recorrido. En su puesto, estaban Gino Peruzzi y Leandro Jara, quienes habían sido adquiridos desde Catania y Estudiantes de La Plata, respectivamente. Eso hizo que Daniel Angelici lo de a préstamo a Defensa y Justicia, para que gane rodaje.

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Una vez concluida su estadía en Varela, en donde jugó 26 partidos y había ganado experiencia, volvieron a prescindir de sus servicios ya que el flamante marcador derecho ahora era Julio Buffarini. Esta vez lo enviaron a Rosario Central, en donde verdaderamente mostró un gran nivel y siendo de lo más destacado del Canalla. En ese sitio redobló la apuesta y jugó más: Registró 31 cotejos, un gol y tres asistencias. Finalmente retornó a Boca, pero su vínculo vencía a los seis meses.

Su frustrada renovación y salida a Europa

El Udinese de Italia sabía que se estaba por quedar libre, entonces le hizo un pre contrato y así dejó al Xeneize con las manos vacías, lamentando la partida del por entonces joven lateral que prometía mucho. El resto es historia: Campeón dos veces con la Selección Argentina y un pase multi millonario al Atlético Madrid del Cholo. Mientras tanto, Gino Peruzzi, por quien en parte dejó el club y en quien confiaban, se fue cuestionado y pasó por San Lorenzo, en donde también le fue mal y recaló en la liga peruana, para formar parte de Alianza Lima.