El gesto que molestó a todo el fútbol argentino en la final de la Primera Nacional y luego de la muerte de Lucas González

Lucas González fue baleado en la cabeza cinco días atrás por policías de la Ciudad de Buenos Aires, cuando se dirigía junto a algunos de sus compañeros a entrenar en la sexta división del club Barracas Central. Dos de los tres efectivos involucrados aceptaron haber sido quienes dispararon.

Anoche, Tigre y Barracas Central se enfrentaron en cancha de Banfield en la final del torneo de la Primera Nacional, buscando al ganador del primer ascenso que otorga la categoría al torneo de la Liga Profesional. El equipo presidido por Chiqui Tapia saltó al campo de juego con unas remeras negras recordando al joven. 

Ambos equipos posaron ante los reporteros gráficos con banderas alusivas al hecho pidiendo justicia por el jugador asesinado. Fue aquí donde se vivió el hecho que indignó a más de una persona. Cuando fue el turno del Guapo de sacarse la foto, en primera medida los jugadores decidieron salir con la bandera antes que posar con el cartel que mostraba el escudo de ambos equipos.

Un hombre de camisa blanca se acerca a los jugadores y de forma vehemente saca la bandera, señalando a los jugadores el cartel con el que debían sacarse la foto antes de poder comenzar el partido.