Inédito: la lección inolvidable de Menotti a Gabriel Milito en Independiente

Gabriel Milito volverá a dirigir. El Mariscal había rechazado varias ofertas luego de su paso por Argentinos Juniors, pero finalmente se vio seducido por la chance de Atlético Mineiro y retomará la actividad en lo que será su primera experiencia en Brasil y la segunda en el extranjero (ya había sido entrenador de O'Higgins en Chile).

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A pesar de su afinidad con Independiente, Gaby no tomó las riendas del club cuando lo necesitaron y fue Carlos Tevez quien agarró ese fierro caliente. Sin embargo, en las últimas horas Milito contó una inédita anécdota que vivió en el Rojo y que lo marcó para siempre. Apostá en Betsson a los partidos de las mejores ligas internacionales y duplica tu saldo hasta 50.000 pesos en tu primer depósito.

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La inolvidable lección de Menotti a Gabriel Milito en Independiente

El exdefensor charló con Juan Pablo Varsky y reveló una anécdota inédita que vivió con el Flaco en el inicio de su carrera. “El ‘Flaco’ Menotti fue quien me dio la continuidad en Primera División. Él me pone a jugar en un equipo lleno de jugadores importantes. Empecé jugando de lateral izquierdo y uno con la emoción juega de cualquier cosa, pero yo quería jugar como central. Nunca había jugado de lateral", comenzó contando.

Y continuó: "Me puso en un partido contra Estudiantes en su viejo estadio y perdimos 4-1. Fue un desastre mi partido. Hice un penal, regalé un gol, todo mal hice. Recuerdo que me subo al auto con mi viejo que me venía a ver y le dije: ‘Llego el lunes y le digo a César que no juego más de lateral. Esperaré lo que tenga que esperar, pero no juego más de lateral’. El lunes llegué al entrenamiento y César me hace llamar a su despacho. Agarra y me dice: ‘Gabi, tranquilo. Vas a jugar, no muchos, pero algún que otro partido en tu carrera como este. No va a ser ni el primero ni el último. Lo que tenés que saber es que el único que sé que juega el próximo partido sos vos’".

Por último, cerró: "Salimos de esa charla y reunió al equipo. Le dijo al grupo: ‘No sé cómo vamos a jugar el domingo ni quién va a jugar, pero lo único que sé es que va a jugar Gabi y 10 más’. Yo tenía 18 años y había jugado un partido horroroso. Si un entrenador te respalda de esa manera, ¿cómo no iba a dar todo por él y por el equipo? Me respaldó en un momento en el que muchos hacen la más fácil. Son esas experiencias que no te las olvidás”.