Por Ramiro Diaz
La relación entre Neymar y Kylian Mbappé, dos de las grandes estrellas del PSG, siempre fue vista como un vínculo cercano, lleno de momentos de camaradería tanto dentro como fuera del campo. Sin embargo, una fiesta en la discoteca L’Arc, ubicada a pocos metros del Arco del Triunfo, dejó un sabor amargo entre los dos futbolistas.
L’Arc, un club exclusivo frecuentado por jugadores del PSG, es conocido por su lujo y por los precios elevados que maneja, especialmente cuando se alquilan mesas VIP y se consumen botellas de bebidas premium. Neymar y Mbappé no fueron la excepción en una de esas noches de fiesta, pero lo que comenzó como una salida de amigos terminó con un incidente que rápidamente llegó a los titulares.
Según el reconocido medio francés L’Équipe, Neymar cometió un grave error al romper una regla no escrita en la discoteca: "El que pide, paga". El exjugador del Barcelona, tras disfrutar de una noche llena de lujo y consumo de costosas botellas, decidió abandonar el lugar sin abonar la cuenta, dejando a Mbappé con la obligación de saldar el total de lo consumido.
Aunque no se revelaron los montos exactos, se destacó que la cuenta fue considerablemente alta, lo que no hizo más que agravar la situación. El propio Neymar, quien tiene una reputación de disfrutar de la vida nocturna, pareció no medir las consecuencias de su gesto, comprometiendo a su compañero de equipo a pagar una suma que, según las fuentes, rondaba cifras elevadas.
Si bien en el ámbito del fútbol los jugadores son conocidos por disfrutar de fiestas y salidas, lo que ocurrió aquella noche parece haber generado una tensión innecesaria entre dos de los pilares del PSG. Mbappé, quien siempre se ha mostrado como un profesional comprometido con su equipo, no tomó bien el hecho de ser obligado a saldar la cuenta por un comportamiento que, para muchos, es poco ético.
El joven delantero francés había compartido una relación cercana con Neymar en el pasado, pero este episodio ha dejado dudas sobre el vínculo entre ambos. Si bien Mbappé no hizo público su malestar en ese momento, se sabe que el incidente no fue bien recibido por él ni por el resto del plantel.
La discoteca L’Arc, conocida por su exclusividad, es uno de los lugares preferidos por los futbolistas del PSG para relajarse después de un partido o de entrenamientos intensos. El precio de una mesa VIP en este club puede superar los 20.000 euros, y las bebidas más caras, como champagnes y licores premium, son la norma. Neymar y Mbappé no eran ajenos a este mundo de lujo, pero la noche terminó dejando una imagen poco favorable para el brasileño.
Este incidente refleja cómo los pequeños deslices pueden generar grandes repercusiones en el mundo del fútbol, especialmente cuando involucran a figuras tan relevantes como Neymar y Mbappé. Mientras el PSG sigue siendo uno de los equipos más poderosos de Europa, este tipo de controversias también puede ser un recordatorio de que, más allá del talento dentro del campo, las relaciones personales entre los jugadores juegan un papel crucial en el rendimiento colectivo.
Lo que ocurrió en L’Arc es solo un capítulo más de las historias que suelen salir a la luz en el ambiente de los grandes clubes, pero sin duda, dejó una marca en la relación entre dos de los mejores futbolistas del planeta.
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