Casi arruina el mundial de Argentina, ahora será compañero de tres campeones

Luego de la Copa del Mundo, el mercado de pases sufrió varias modificaciones. Es que a raíz de grandes actuaciones de algunos de los jugadores participantes, sus valoraciones han subido. El caso más resonante puede ser el de Enzo Fernández, quien había sido comprado por Benfica desde River Plate por 14 millones de dólares y ahora cuesta 120 según su cláusula.

Sin embargo no ha sido el único, ya que Kolo Muani, Thruam, Julián Álvarez y Amrabat por citar algunos ejemplos siguen el mismo camino. Sin embargo, no todos han realizado el mejor de los papeles y sus carreras han dado un giro inesperado con respecto a sus equipos durante el día a día. Tal es así, que un rival que tuvo la albiceleste cambió de institución.

Más noticias de fútbol internacional:

Mientras recuerda el título en Qatar, la traición que recibe Di María en Italia

Mientras Messi cuesta 50 millones, lo que quiere PSG para dejar salir a Mbappé

Se trata de Menphis Depay, quien dejará el FC Barcelona en las próximas horas. Es paradójica su salida ya que hace casi dos años, el delantero fue intensamente buscado por el blaugrana, quien no se lo pudo comprar al Olympique de Lyon y debió aguardar a que se quedara con el pase en su poder. Además, está muy relegado por Robert Lewandowski y Dembelé.

Su nuevo destino es el Atlético Madrid del Cholo Simeone, por lo que compartirá plantilla con tres campeones del mundo: Rodrigo De Paul, Nahuel Molina Lucero y Ángel Correa. Según la información revelada por el periodista Fabrizio Romano, especialista en mercado de pases, firmó contrato hasta junio del 2025. Formó parte del duelo entre Países Bajos y Argentina, en el cual su aporte no fue el esperado pero que casi deja a los de Scaloni sin semifinales, teniendo que recurrir a los penales.

La carrera de Memphis Depay

El número ‘10’ de su país tuvo el mejor momento de su carrera en el Lyon francés, y eso le valió la jugosa compra que hizo Manchester United en 205 por él, en donde fue dirigido tácticamente por su compatriota Louis Van Gaal, a quien finalmente no convenció y terminó marcando su salida del elenco inglés, sin pena ni gloria.