Fútbol Internacional

Arruinó el primer Mundial de Messi, ahora atacó a un vecino con una motosierra

Este exjugador fue el verdugo de la Selección Argentina en el Mundial de Alemania 2006.

Por Pedro Ramirez

Este exjugador fue el verdugo de la Selección Argentina en el Mundial de Alemania 2006.

La Selección Argentina volvió a ser campeona del mundo hace poco más de un año luego de un largo tiempo de sequía y varias decepciones. Hasta el 2022, toda una generación había creido con los relatos de 1978 y 1986, pero no había sido capaz de festejar en carne propia un Mundial a pesar de contar con Lionel Messi, el mejor jugador de todos los tiempos.

La fuerte le fue esquiva a la Pulga en sus participaciones en Copa del Mundo y la de Brasil 2014 parecía haber sido la chance de oro que se escapó, pero la Pulga no se rindió y a sus 35 años levantó el ansiado título para ponerle le broche de oro a su carrera y tomar un lugar privilegiado en el olimpo de los mejores de la historia. Ahora bien, antes de aquella derrota ante Alemania en el Maracaná, Leo ya había sufrido otras dos decepciones. Apostá en Betsson a los partidos de las mejores ligas internacionales y duplica tu saldo hasta 50.000 pesos en tu primer depósito.

La primera vez que Messi jugó un Mundial fue en Alemania 2006 y tuvo que ver desde el banco de suplentes cómo el anfitrión eliminaba por penales a la Argentina de Pékerman de la mano de Jens Lehmann, famoso arquero que se convirtió en verdugo de la Albiceleste con un machete que le ayudó en la definición desde los 12 pasos. Ahora, el exguardameta fue noticia por atacar la propiedad de un vecino con una motosierra.

¿Por qué Lehman atacó a su vecino con una motosierra?

Todo comenzó luego de que la víctima denunciara al exarquero por haber intentado desconectar los cables de las cámaras de seguridad de la cuadra de su domicilio en Starnberg, una ciudad cercana a Múnich. Luego, todo fue a más y Lehman terminó ingresando al garage del residente con una motosierra y rompió unas vigas del techo. El tribunal lo consideró culpable de daños a la propiedad, injurias e intento de fraude, por lo que le impuso el pago de la citada cantidad, a razón de 210 cuotas diarias de 2.000 euros cada una.

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