Histórico: Lanús eliminó a un multicampeón brasileño en una serie para el infarto que terminó 6-6 en el global.

Lanús pasó a octavos de una forma sorprendente, en un partido para el infarto: visitó a San Pablo por la vuelta de los 16avos de final de la Copa Sudamericana en el estadio Morumbí. El conjunto granate venía de ganarle por 3-2 en la ida, en La Fortaleza, en lo que fue un verdadero partidazo. Ambos equipos llegaron al encuentro conociendo a su potencial rival si pasaban de ronda: Bolivar de Bolivia, quien eliminó al Audax Italiano con un global de 4-2, el pasado martes.

En la primera parte, la joya de las inferiores del equipo argentino, Pepo de la Vega destrabó lo que era un partido reñido con un tremendo derechazo desde afuera del área, que se coló en el ángulo de Tiago Volpi; 10 minutos más tarde, el histórico lateral brasileño, Dani Alves, empató el encuentro con un gran cabezazo proveniente de un tiro de esquina. Luego, justo antes de que termine el primer tiempo, Brahian Aguirre definió de gran manera y puso el 2-1 para Lanús.

En el segundo tiempo, San Pablo demostró su superioridad, desde el principio, que se vio reflejada en el empate que estampó Pablo Teixeira a los 62 minutos. Luego, Thaller se metió un gol en contra a los 87 y Gabriel Sara puso el 4-2 a los 89. Finalmente, a los 93, cuando parecía todo perdido, Nicolás Orsini salvó a Lanús y convirtió el 4-3, que le dio al granate su pasaporte a los octavos de final.

Si bien pasó de fase, Lanús siguió profundizando una racha negativa: lleva 9 partidos sin ganar como visitante en la Copa Sudamericana. Con este histórico triunfo, por 6-6 en el global, pero superioridad en goles de visitante, los dirigidos por Luis Zubeldía buscarán repetir la hazaña que logró el club en 2013, cuando levantó este trofeo de la mano de Guillermo Barros Schelotto y compañía. ¿Podrán hacerlo? Si siguen por esta vía sí.