Por Andres Fuentes
El ciclo de Marcelo Gallardo fue sin dudas un antes y un después en la historia de River Plate, en donde a raíz de su enorme trabajo el club pudo dar nada menos que 14 vueltas olímpicas en ocho años. Además, dejó definitivamente atrás el duelo por el descenso del 2011 y torció la historia ante Boca Juniors por torneos internacionales, su karma en el pasado.
Todo eso lo colocó como un gran estandarte del club, quien ahora está alejado desde diciembre del 2022 buscando la mejor opción para su futuro. Pero otra virtud que se le destacaba al Muñeco era el ojo clínico que tuvo tanto para promover juveniles al primer equipo como también para detectar fichajes de jerarquía, y no precisamente figuras rutilantes.
En un momento dado, precisamente en el verano del 2019 luego de ganar la famosa final de Libertadores en Madrid ante el Xeneize, Gallardo buscaba un sucesor en la zona caliente del ataque ante la salida de Juan Fernando Quintero, y se fijó en otro colombiano que la rompía en su país. Se trata de Luis Díaz, quien brillaba en Junior de Barranquilla.
Las cosas parecían marchar sobre ruedas para que se concrete su salida a River, pero la dirigencia del conjunto cafetero consideró insuficiente el ofrecimiento de Rodolfo D'onofrio, que fue de 6 millones de dólares por el 75% de su pase. Finalmente, se terminó yendo por mucho mas al FC Porto y ahora brilla en el Liverpool, lo que le da la razón al Muñeco. Ahora, una polémica lo sigue.
El delantero colombiano y varios de sus compañeros aprovecharon el buen momento en la Premier League y salieron a celebrar en territorio español hace pocos días, algo que no cayó bien entre sus hinchas. A solo un punto de clasificar a la Champions League, creen que el momento es inapropiado para relajarse y repudiaron las fotos que vislumbran salidas nocturnas en Barcelona.
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