El tenso momento que se dio en el sorteo de Copa Libertadores entre Boca y River

Desde que se jugó la última fecha de la fase de grupos, los 16 clasificados a los octavos de final en la Copa Libertadores de América esperaban una sola cosa: El sorteo. Si bien el mismo estaba pautado para los primeros días de agosto, finalmente primó el sentido común y Alejandro Domínguez determinó que sea este miércoles 5 de julio. Desde las 13 horas todos estarían del otro lado, esperando su destino.

En primera instancia se darían a conocer los cruces de los 16avos de final de la Copa Sudamericana, en donde había equipos argentinos involucrados. Newell's Old Boys, Patronato, San Lorenzo, Estudiantes de la Plata, Defensa y Justicia y Tigre ya saben contra quiénes irán, pero el plato fuerte del mediodía llegó minutos más tarde. Una vez explicado el procedimiento, las bolillas empezaron a ser retiradas.

Conforme se iban dando los cruces, la expectativa iba creciendo cada vez más. Primero la suerte determinó que Racing Club juegue ante Atlético Nacional; y luego Argentinos Juniors sabe que tiene una parada brava al tener que medirse frente al Fluminense. Pero algo ocurría dentro de la sede de CONMEBOL: Había un nerviosismo tremendo, ya que solo faltaban develar cuatro bolillas, y ni Boca ni River habían salido sorteados.

El sorteo que detuvo a un país entero

La mujer encargada de decidir el destino de los equipos retiró la bola con el nombre de River Plate, quedando dentro del bolillero solo como posibles rivales Boca Juniors e Inter de Porto Alegre. Con mucho suspenso la abrió y para el relajamiento general, el elenco de Brasil fue quien finalmente se medirá ante los de Martín Demichelis. Por su parte, el Xeneize hará lo propio ante Nacional de Uruguay.