Conmueve a todo Racing, Maravilla Martínez reveló lo que vivió en la cárcel

Antes de que se confirmara su llegada a Racing Club, Adrián Martínez llevaba semanas siendo vinculado a Independiente. Sin embargo, el equipo que terminó acelerando por el centrodelantero fue la Academia, ya que el Rojo fichó a Gabriel Ávalos. Martínez quedó libre de Instituto y Racing le compró su pase en 2 millones de dólares, además de firmarle un contrato hasta diciembre de 2026. Cuando fue presentado en conferencia de prensa junto a otros refuerzos, luego de la misma Martínez habló con Radio Mitre y confesó que eligió a Racing por sobre Independiente, lo que generó mucha repercusión en Avellaneda.

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En 2014, Adrián Martínez estuvo detenido durante 6 meses. El futbolista fue acusado de haber vengado a su hermano, quien había recibido 3 balazos en el pecho. Sin embargo, luego fue liberado porque no había pruebas en su contra. 'Maravilla' habló con Infobae y reveló que desde aquel momento se volvió una persona muy religiosa. “Desde que salí de la cárcel, mi vida estuvo enfocada en Dios", apuntó el oriundo de Campana. Apostá en Betsson a los partidos de las mejores ligas internacionales y duplica tu saldo hasta 50.000 pesos en tu primer depósito.

Al igual que lo que se pudo ver cuando Ronaldinho estuvo preso en Paraguay, en los establecimientos penitenciarios se juega al fútbol, aunque a veces el clima se pone espeso. "La realidad es que los presos se matan y pasan hambre. La mayoría de los convictos están todo el día drogados o empastillados. No es como en las series, que te pasan la comida con una vianda. En muchos casos, si tus familiares no te llevan la comida no comés. Después de pasar por esa situación, uno mira la vida de otra manera, y disfruta de todas las cosas que a uno se le están dando”, expresó 'Maravilla'.

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Fútbol en la cárcel

Adrián Martínez reveló cómo es el fútbol en las cárceles: "Adentro se podía jugar, pero había una sola cancha. Y cuando se armaban los partidos, la mayoría salía a descargarse. Se agarraban a puñaladas, porque jugaban con facas. Imagino que Dinho podía jugar más tranquilo, por lo que él representa: lo cuidaban mucho. En mi caso, se armaban quilombos bastante seguido”.