La increíble racha que intentará cortar la selección argentina este martes ante Brasil

La Selección Argentina buscará este martes romper una racha que lleva dos décadas sin poder cortar: ganarle a Brasil como local en el marco de las Eliminatorias Sudamericanas. Han pasado veinte años desde la última vez que la Albiceleste se impuso en casa ante su eterno rival, y los recuerdos de aquella noche mágica todavía perduran en la memoria de los hinchas.

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El recuerdo imborrable del 2005

La última vez que Argentina derrotó a Brasil como local por Eliminatorias fue el 8 de junio de 2005, en un histórico encuentro disputado en el Estadio Monumental. En aquel entonces, el equipo dirigido por José Pékerman se impuso por un contundente 3-1 frente a una Brasil plagada de estrellas de la talla de Cafú, Roberto Carlos, Robinho, Kaká, Adriano y el icónico Ronaldinho.

Aquella noche, la gran figura fue Juan Román Riquelme, quien ofreció una exhibición de fútbol que quedó grabada en la memoria colectiva. El talentoso mediocampista de Boca Juniors deslumbró con su habilidad para manejar los tiempos del partido, desparramando rivales y aportando un golazo memorable a los 18 minutos del primer tiempo. Su disparo desde fuera del área dejó sin opciones al arquero brasileño, desatando la euforia de los hinchas presentes en el Monumental.

Junto a Riquelme, otro protagonista destacado fue Hernán Crespo, autor de un doblete que sentenció el triunfo argentino. El primer gol del delantero llegó poco después del tanto de Riquelme, mientras que el segundo se produjo antes del descanso, consolidando una ventaja que Brasil no pudo remontar. El único tanto de la "Verdeamarelha" llegó en el segundo tiempo a través de un potente disparo de Roberto Carlos a los 26 minutos.

Un triunfo que valió un pasaje a Alemania

Aquel triunfo ante Brasil no solo tuvo un sabor especial por tratarse del clásico sudamericano, sino que también sirvió para sellar la clasificación de Argentina al Mundial de Alemania 2006. El equipo de Pékerman llegó a esa fecha con la posibilidad de asegurar su boleto a la Copa del Mundo, y lo hizo con autoridad, imponiéndose ante el último campeón mundial.

El camino de Argentina en aquel Mundial terminó en los cuartos de final, cuando cayó por penales ante la selección local tras empatar 1-1 en tiempo reglamentario. No obstante, la victoria ante Brasil quedó en la historia como uno de los puntos más altos de aquella generación.

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Los intentos fallidos desde entonces

Desde aquel partido, Argentina ha tenido tres oportunidades de volver a vencer a Brasil como local por Eliminatorias, pero no logró repetir la hazaña:

• En 2009, el clásico se trasladó al estadio Gigante de Arroyito en Rosario, donde Brasil se impuso por 3-1. Aquel encuentro fue clave para las aspiraciones argentinas de cara a Sudáfrica 2010, pero la "Canarinha" fue implacable.
• En 2015, el duelo regresó al Monumental, pero terminó en empate 1-1. El gol argentino lo marcó Ezequiel Lavezzi en los primeros minutos, mientras que Lucas Lima empató para Brasil en el segundo tiempo.
• El último antecedente se dio en 2021, cuando ambas selecciones igualaron 0-0 en el estadio Bicentenario de San Juan. Fue un encuentro cerrado, con pocas emociones, donde la tensión superó al juego.

El desafío de romper la racha

Ahora, bajo la dirección técnica de Lionel Scaloni, la Albiceleste buscará cortar esta negativa seguidilla y volver a festejar en casa ante su clásico rival. Con jugadores de la talla de Lionel Messi, Ángel Di María y el arquero Emiliano "Dibu" Martínez, Argentina cuenta con la experiencia y la jerarquía necesarias para afrontar el desafío.

Además, este partido tiene un condimento especial: una victoria ante Brasil no solo cortaría la racha, sino que también dejaría a Argentina al borde de asegurar su clasificación al Mundial 2026. La expectativa es alta, y el Monumental será el escenario perfecto para una nueva noche de gloria o, en caso contrario, para extender una maldición que ya lleva veinte años.

El martes, la historia volverá a escribirse en uno de los clásicos más apasionantes del mundo. Argentina va por la hazaña, y la posibilidad de romper con dos décadas de sequía ante Brasil en casa es una motivación extra para el plantel campeón del mundo.