Boca Juniors en alerta: futbolistas cuestionan una exigencia de Fernando Gago

Lola del Carril sacudió el mundo del fútbol al revelar información interna sobre una creciente disconformidad dentro de un plantel profesional. Según la periodista, varios jugadores estarían preocupados por las exigencias extremas en materia de nutrición, lo que generó un clima tenso con el cuerpo técnico.

“No pueden bajar más”: el reclamo de los jugadores

En sus declaraciones, Lola del Carril expuso que algunos futbolistas sienten que las demandas nutricionales han llegado a un punto insostenible. “Están al límite. Te piden más y bajar más y bajar más…”, expresó la periodista, dejando en claro que la presión para reducir el porcentaje de grasa corporal está afectando a varios integrantes del equipo.

La alimentación y la preparación física son aspectos clave en el alto rendimiento, pero el reclamo de los jugadores apunta a que se ha cruzado un límite. “Llega un momento en el que ya no se puede combinar la exigencia del alto rendimiento con el bajar siempre más”, advirtió del Carril.

La falta de flexibilidad del cuerpo técnico

Otro de los puntos que generó malestar en el plantel es la postura inquebrantable del cuerpo técnico ante este tema. Según la información revelada, algunos jugadores expresaron su imposibilidad de seguir bajando su peso o grasa corporal, pero no encontraron receptividad por parte de los preparadores.

“Si un jugador plantea que más no puede bajar y se le exige… Tiene que haber mayor predisposición (del cuerpo técnico) y no la hubo”, sentenció Lola del Carril. Esta falta de apertura para atender las inquietudes de los futbolistas podría traer consecuencias en el rendimiento del equipo.

Un problema recurrente en el fútbol de élite

Las exigencias físicas en el fútbol de alto nivel han llevado a situaciones similares en otros equipos. La obsesión por un estado físico ideal ha generado conflictos en diferentes clubes, con jugadores que sienten que las demandas exceden los límites saludables.

En este contexto, la preocupación expresada por los futbolistas no es menor. Si el cuerpo técnico no flexibiliza su postura, el descontento podría crecer y afectar la relación entre los jugadores y los entrenadores.

Habrá que esperar para ver si esta situación tiene repercusiones en el plantel o si el cuerpo técnico decide modificar sus exigencias para encontrar un equilibrio entre la preparación física y la salud de los jugadores.